Cómo un grupo indígena en el Lejano Oriente de Rusia luchó para proteger sus tierras: la creación del Parque Nacional Bikin

La historia y la creación del Parque Nacional Bikin

Pavel —

Logramos expulsar a la empresa Hyundai de nuestras tierras mediante varios procedimientos judiciales, en los que fuimos representados por un asesor legal y un abogado de California que tenía experiencia trabajando por los derechos indígenas en Estados Unidos.

En 1991, también logré reunirme con Boris Yeltsin, en ese momento el jefe de la Corte Suprema de la Unión Soviética, y lo invité a que viniera a nuestra tierra y viera los problemas a los que nos enfrentamos. Transmitió el asunto a sus diputados y su asesor tomó la decisión de suspender todo el trabajo en el territorio Bikin. A pesar de esto, las empresas siguieron tratando adueñarse de nuestras tierras.

“Incluso cuando tenemos leyes en Rusia para proteger los derechos indígenas, esto no quiere decir que la ley funcionará”.

Polina Shulbaeva

Desde entonces y hasta el 2007, había mucha gente que quería adueñarse de nuestro territorio: algunas empresas dedicadas a la producción de madera, a la explotación maderera y, sobre todo, a la extracción de oro. Las empresas intentaron negociar con nosotros para hacernos cambiar de opinión, pero no dimos nuestro consentimiento. Fue una lucha de 20 años, pero conseguimos proteger nuestra tierra de esta manera.

En el 2007, la tierra del bosque Bikin se puso en subasta. Hubo siete postores, incluidos nosotros mismos, y los otros seis fueron todos grandes empresas o negocios. Creo que pueden imaginar lo difícil que fue para nosotros competir con ellos. Pero decidimos utilizar algunos mecanismos para ayudarnos.

• En primer lugar, estaba el protocolo de Kioto, que obliga a los países desarrollados a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. Las empresas que licitaban emiten muchos contaminantes, mientras que las personas pertenecientes al pueblo Udege no. Esta era una ventaja que teníamos.
• También entramos en negociaciones con Alemania y un banco alemán, con el apoyo del WWF. Ya que no pudimos recaudar el dinero necesario para ganar la subasta, el banco alemán dijo que nos daría el dinero para arrendar la tierra del Gobierno ruso en forma de subvención. Pero incluso con el dinero que ofrecían, aún no podíamos competir con los presupuestos de estas grandes empresas.
• En ese momento, yo era miembro del Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones Indígenas. Le dije a las autoridades federales rusas que si vendían nuestro territorio a una empresa, acudiría a las Naciones Unidas y declararía que se estaba produciendo un genocidio contra nuestro pueblo. El gobierno de Moscú ordenó entonces a las autoridades locales que entregaran las tierras al pueblo Udege. El día que se celebró la licitación, las empresas comerciales retiraron sus ofertas y ganamos las tierras con la ayuda de nuestros patrocinadores.

A pesar de que finalmente obtuvimos la titularidad legal de nuestra tierra, con el tiempo se produjo una degradación de nuestra comunidad y de la administración Udege que manejaba las tierras. Algunas personas empezaron a vender partes de las tierras a empresas y empresarios privados, y también comenzó a presentarse la caza ilegal. Algunos miembros de la administración comenzaron a caer en prácticas corruptas y la gente tenía miedo de hablar en contra de ellos porque tenían la autoridad para confiscar sus tierras.

Entonces me llegó la oferta de asumir el cargo de Presidente del Parque Nacional. Reuní un pequeño grupo de personas que no tenían miedo de hablar en contra de la administración Udege y empezamos a discutir qué hacer. Y comprendimos que la creación de un parque nacional era una de las soluciones de compromiso que nos ayudaría a alcanzar nuestro objetivo y a la vez satisfacer tanto a las empresas como al Gobierno.

Empezamos a negociar. Presentamos siete exigencias para el parque nacional, que pensábamos que iban a ser muy difíciles de aceptar; tendrían que cambiar la legislación rusa para permitirnos continuar con nuestro modo de vida tradicional en el parque. Pero, para nuestra sorpresa, aceptaron todas nuestras demandas.

En el 2015, Vladimir Putin firmó la orden para la creación del Parque Nacional Bikin, y fue creado con el manejo conjunto y propiedad entre el Estado ruso y el pueblo Udege.

Establecimos el Comité Étnico Udege, y aunque al principio la comunidad estaba en contra de la idea de un parque nacional, conseguimos convencerla.

“La creación de un Parque Nacional no era la mejor solución, pero era la única posible. No es perfecta, pero funciona”.

El tigre siberiano

Pavel —

Es importante señalar que el presidente y su administración cumplieron con nuestras demandas de crear un parque nacional, no porque quisieran ayudar al pueblo Udege, sino por los tigres que viven en el bosque Bikin. En 2010 se celebró una cumbre en San Petersburgo para proteger a los tigres, y Vladimir Putin, el presidente en ese momento, tuvo que demostrar que estaba trabajando para proteger al raro tigre siberiano de Amur.

Alrededor del 10% de la población de tigres siberianos de Amur, en peligro de extinción, vive en el parque Bikin, por lo que era un área clave para ayudar a protegerlos. La población de tigres estaba disminuyendo en ese entonces debido a toda la industria y porque hay una gran demanda de tigres en la atención médica oriental: muchas personas intentan matarlos y cazarlos para hacer medicinas .

Nosotros, los Udege, lográbamos mantener alejada a la industria, y de esta forma nuestro aire y nuestras tierras se mantuvieron puros para que los tigres pudieran vivir con éxito y en paz.

El Gobierno creó el parque nacional para los tigres, no para la gente. Pero nos convenía entonces y por eso aceptamos.

El tigre es uno de los animales sagrados del pueblo Udege. El tigre es uno de los animales sagrados del pueblo Udege. Como Udege, nuestra creencia es que si alguien mata un tigre habrá un castigo enorme y el tigre se vengará. Es un pecado enorme, y no será perdonado por los dioses. Nunca se ha presentado la situación en que una persona Udege haya sido castigada por un tigre, porque los percibimos como nuestro hermanos, y no los cazamos. No tocamos a los tigres y ellos no nos tocan a nosotros, así es como funciona.

La estrategia Udege

Pavel —

¿Cuál fue el secreto para que lográramos resistir? Hay 1700 personas Udege repartidas en cuatro aldeas. Un gran Estado o una gran empresa hubiera podido aplastarnos. Sin embargo, veo varios factores por los cuales logramos crear el Parque Nacional Bikin:

• Lo Unidad del pueblo Udege Acordamos que estaríamos junto y unidos, que cualquier problema que tuviéramos debería ser resuelto de manera conjunta. Si yo estuviera solo, o si fuéramos 10 o 100, nos meterían en la cárcel o nos matarían, les resultaría fácil. Pero el Estado no podía matarnos a todos. Las autoridades distritales y regionales venían y trataban de sacarme de mi puesto de liderazgo, tratando de sembrar discordia en nuestra comunidad diciendo que estaba descuidando a la gente, que estaba recibiendo sobornos. Pero confiamos el uno en el otro y no dejamos que eso nos afectara.

• Buscamos activamente aliados que nos ayudaran. No somos un grupo grande por lo que el Gobierno podría destruirnos si realmente quisiera, pero atrajimos científicos rusos y extranjeros a Bikin para que lo estudiaran. Se convencieron de su singularidad y lo llamaron el Amazonas ruso, el pulmón del hemisferio norte, demostrando que era extremadamente biodiverso y que contenía una flora y una fauna únicas y en peligro de extinción. Escribieron documentos sobre los motivos por los que debía conservarse y no entregarse a las industrias.
• El alto nivel de educación del pueblo Udege. Nuestros mayores nos decían constantemente lo importante que era la educación. Muchos de nosotros abandonamos Bikin para cursar estudios superiores, pero después volvimos a nuestro pueblo. Durante la crisis de los años 90,[the dissolution of the Soviet Union in 1991 led to a constitutional an financial crisis] en toda Rusia muchas personas con un alto nivel educativo abandonaron sus pequeñas aldeas para conseguir trabajo en las ciudades, pero esto no ocurrió con el pueblo Udege. Los especialistas se quedaron en el pueblo y contribuyeron a su comunidad, pensando no sólo en la supervivencia, sino también en el desarrollo de su pueblo.

Gracias a nuestra experiencia y al intercambio de conocimientos entre nuestra comunidad, no creímos las promesas vacías de los ricos y los empresarios cuando vinieron a convencernos de que vendiéramos nuestras tierras ofreciéndonos mejores oportunidades económicas e industriales. En cambio, trabajamos para intentar crear esas oportunidades por nosotros mismos.

Cómo funciona el parque en la actualidad

Pavel —

El acta constitutiva del parque establece que el Parque Nacional fue creado tanto para la preservación de la naturaleza como para el desarrollo de la etnia Udege. También asegura la existencia de un Consejo del pueblo Udege, que elegirá al Canciller del Consejo, quien a su vez se convertirá en el Vicepresidente del Parque.

Polina —

El Consejo del pueblo Udege¹ garantiza la participación de los pueblos indígenas en la toma de decisiones relacionadas con la protección de la naturaleza y las especies silvestres, y coordina programas y proyectos que puedan afectar su forma de vida tradicional. El consejo también elabora orientaciones sobre normas y comportamientos para las comunidades locales y supervisa la preservación y el uso de los conocimientos tradicionales.²

Los reglamentos elaborados para el manejo del parque incluyen una clara delimitación de zonas, y la superficie de un millón de hectáreas que se ha zonificado para el manejo tradicional indígena no se puede reducir. Todos los residentes locales conservan el derecho de visitar el parque libremente, dondequiera que vivan, y los cazadores indígenas pueden realizar actividades económicas tradicionales de forma gratuita en sus tierras de caza históricas.

El resto del parque es una reserva, donde las actividades son limitadas. Pero en estas zonas, los guardabosques de Bikin, muchos de los cuales son indígenas, trabajan para proteger la flora y la fauna en peligro de extinción.

“Es único porque no se trata solo de que los pueblos indígenas puedan vivir y usar su territorio, sino que también pueden protegerlo a título oficial”.

La mayoría de los cazadores Udege son empleados del parque. Los empleados indígenas del parque llevan a cabo tareas relacionadas con la protección y el control del territorio así como con el monitoreo basado en la comunidad, que hace uso de los conocimientos, prácticas y rituales tradicionales junto con las nuevas tecnologías y sistemas de información. También facilitan visitas de educación ambiental y turismo ecológico en áreas específicas y limitadas. Los forasteros no pueden visitar el parque Bikin por sí mismos; deben ir con un guardabosques.

Los investigadores y representantes de organizaciones ambientales, como por ejemplo el WWF, están ayudando a educar a los pueblos indígenas sobre las modernas tecnologías de protección del medio ambiente (como cámaras trampa, modernos dispositivos de navegación y vehículos aéreos no tripulados o drones).

En la actualidad hay unas 700 personas que viven en la aldea de Bikin. Antes no tenían hospital, ni electricidad todo el tiempo, pero ahora tienen un hospital de última generación y electricidad las 24 horas del día. Algunos de nuestros jóvenes abandonaron la tierra, pero volvieron cuando se convirtió en parque nacional, porque había trabajo para ellos.

El 2 de julio de 2018, el Comité del Patrimonio Mundial declaró el parque parte del sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO en Sikhote-Alin Central, confirmando la singularidad de esta región. El Parque Nacional de Bikin es la primera área protegida de Rusia cuyo objetivo es proteger el hábitat y el modo de vida tradicional de los pueblos indígenas, así como su participación en la gestión del parque.

El Parque Nacional Bikin es un ejemplo para otros

Pavel —

Bikin no es el único parque nacional de Rusia en el que habitan otras etnias. Me gustaría compartir nuestra experiencia con otros parque nacionales en Rusia, porque nuestra situación no es única.

Para establecer un autogobierno de este tipo es necesario compartir la autoridad. Y, por lo general, el Gobierno ruso no quiere compartir la autoridad, quiere ser supremo, quiere gobernar, quiere tomar el 100 % de las decisiones. No quiere delegar ni compartir el poder.

Polina —

Los parques nacionales son para proteger, no para vivir, así es como lo ve el Gobierno ruso. No se tiene derecho a cazar o pescar en el territorio ni a realizar ninguna actividad tradicional. Un ejemplo es el Parque Nacional de Shorsky, en el suroeste de Siberia: lleva el nombre del pueblo indígena Shor que vivía allí, pero desde que se convirtió en parque nacional, ya no pueden utilizar el territorio.

Por lo general, cuando un gobierno crea un parque nacional o un área protegida, los pueblos indígenas de esa zona tienen dos opciones: o se van del territorio porque no pueden utilizarlo como quieren, o se quedan en su territorio pero no pueden seguir sus formas de vida tradicionales. Pueden quedarse, pero su identidad indígena morirá allí.

Pavel —

El Parque Nacional en Bikin es un gran ejemplo de cómo el manejo conjunto indígena puede funcionar, pero obviamente fue una gran lucha llegar a este punto. Seguirá siendo muy difícil para otros grupos indígenas convencer a las autoridades rusas, y creo que eso también es cierto en todo el mundo. Esperemos que al compartir más historias sobre el Parque Nacional Bikin, podamos convencer a otras personas (tanto a los grupos indígenas como a los gobiernos) de que hagan lo mismo.

Uno de mis colegas indígenas nos dijo que teníamos suerte, porque teníamos tigres. Y esto fue un aspecto muy importante: el tigre siberiano, el tigre de Amur, fue el que atrajo la atención de Putin. Yo recomendaría a otros parques nacionales que miraran su fauna y vieran si hay algo que preservar y que también pueda ser visto como algo simbólico.

“El Parque Bikin es un territorio único con un manejo y sistema de gobernanza únicos. Es una gran oportunidad para copiar esta práctica a otro territorio en Rusia y en otras partes del mundo».

Polina Shulbaeva

El futuro del Parque Nacional Bikin

Pavel —

Creo que el parque nacional es un buen ángel de la guarda contra cualquier tipo de ataque violento por parte de industrias o empresas contaminantes. Lo que más me preocupa son los derechos del pueblo Udege. Podrían hacer algunas enmiendas a la legislación que posiblemente empeorarían nuestro estado. Sin embargo, no veo ninguna tendencia de esto hasta ahora. Todo el mundo está contento: es un buen compromiso que satisface a todas las partes.

Pienso que el hecho de que se haya establecido el Consejo es excelente. Hay personas de mi etnia que pertenecen al Consejo. Participan en reuniones y toman decisiones importantes. Pero también creo que es importante aumentar su peso, su papel en la toma de decisiones dentro del Consejo. Pero tal vez esa sea la próxima etapa del desarrollo del parque y de la zona.

Espero que en el futuro cambie para mejor. Actualmente la legislación requiere algún manejo por parte de las autoridades federales, pero espero que en el futuro sea 100% manejado por el pueblo Udege. Nada sucede rápidamente. Creo que tal vez pasarán varias generaciones antes de que obtengamos el 100% de la administración. No tenemos suficiente experiencia en este momento, por lo que con más experiencia y mayor capacidad, nuestra administración mantendrá su integridad y no permitirá que la corrompan, como sucedió en 2007.

Si las personas exigen derechos, deben entender que es una espada de doble filo; con los derechos vienen las responsabilidades. Si se reclaman sus derechos, deben estar preparados para asumir las responsabilidades.

He hablado por mi pueblo, y están satisfechos con la situación actual. Si observamos la situación que teníamos antes y lo que ocurre ahora, creo que hay una gran mejora y que hemos conseguido mucho. En este momento, lo que tenemos es suficiente, pero podríamos hacer más. El cielo es el límite.