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Durante milenios, los pastores tradicionales han manejado ovejas y vacas en los pastizales de Europa Central, perfeccionando la habilidad de pastorear animales en diferentes pastos. Hoy reconocemos que el pastoreo tradicional es un ejemplo clave de una práctica de medio de vida sostenible que protegen y conservan la calidad de su tierra.

En este artículo, pastores tradicionales Ibolya Sáfianné y su esposo László Sáfián, de la región de Hajdúsámson de Hungría, cuentan sus experiencias de su trabajo, así como con el etnoecólogo húngaro Zsolt Molnár, quien ha realizado extensa investigación sobre el pastoreo tradicional, y es asesor científico del Centro de Investigación Ecológica del MTA. Ibolya y László explican cómo la familia vive y trabaja junta, por qué el pastoreo tradicional es crucial para mantener la biodiversidad, qué distingue al pastoreo tradicional, y qué depara el futuro para los pastores tradicionales.

Zsolt –

El pastoreo tradicional es especial porque se basa en la observación intensiva. Un pastor tradicional pasa todo el día con sus animales, piensa en ellos toda la noche, y ve a cada uno de ellos – de los cuales hay cientos – como individuos. Todas sus actividades se basan en este detallado trabajo de observación.

La otra cosa que hace que el pastoreo tradicional sea diferente es el vínculo especial que tienen con sus animales.

Los pastores tradicionales obtienen sus primeras ovejas a la edad de dos o tres años. Estarán exigiendo una oveja desde esta temprana edad. Y cuando obtienen las ovejas, también obtienen la responsabilidad. Cuando tú tienes hambre, les das de comer a ellas; cuando tú tienes sed, les das agua a ellas. Y eventualmente, te comerás las ovejas. Esta responsabilidad basada en el amor es la esencia del pastoreo tradicional.

Un pastor cuida su rebaño Cortesía de: Abel Peter
Autores
  • Ibolya Sáfianné, Pastora, Hajdúsámson, Hungría
  • László Sáfián, Pastor, Hajdúsámson, Hungría
  • Zsolt Molnár, Etnoecólogo, Centro de Investigación Ecológica, Hungría
Ecosistemas
  • Pastizales y matorrales
Temas
  • Conocimientos, cultura y uso sostenible
Tipo
  • Forma larga
Fecha
  • Este estudio de caso forma parte de LBO-2, publicado originalmente en 2020.

Ibolya – 

Para nosotros, la familia ocupa un rol muy importante, y todos sabemos que los animales son lo primero. Las ovejas están siempre en el centro. Siempre están en nuestra mente porque esto es lo más importante para nosotros.

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La familia en la granja: Ibolya Sáfiánné, László Sáfián, Ibolya Sáfián (hija), Erika Sáfiánné, Lajos Sáfián, Erika Sáfián (hija), Lalika Sáfián. Crédito Ibolya Sáfiánné

Ibolya – 

Cuando mi hija era solo un bebé, la llevé al cobertizo para que se acostumbrara a los sonidos de los animales desde el principio. En invierno, la poníamos al lado de los animales mientras les alimentábamos.

Otros niños se asustan con los sonidos extraños, pero ella se calmó en cuanto escuchó las ovejas, los caballos y los perros. Cuando era una niña pequeña, aprendió a caminar entre las ovejas. Un extraño espantaría a los animales, pero si un niño se acostumbra, sabe cómo moverse para no molestar a los animales.

Y luego la llevábamos con nosotros cuando llevábamos a los animales a pastar al pastizal. Y a ella le encantó. Recogía flores o jugaba con los corderos antes de la edad del jardín de infantes, antes de los tres años. Siempre la llevaba conmigo al pastizal. Y ahora, cuando tiene vacaciones de verano en la escuela, va con su padre al pastizal o le lleva una comida a su padre al pastizal por la mañana.

Cuando llega a casa de la escuela, siempre viene al cobertizo y ayuda con el trabajo; alimentando a los corderos, cuidándolos. Ella tiene sus propios corderos, sus favoritos y su propio perro. Es obvio que le encanta, que le interesa, pero nadie sabe lo que depara el futuro.

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La hija de Ibolya marcando las ovejas después de haberlas tratado contra los parásitos. Crédito Ibolya Sáfiánné.
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László e Ibolya comiendo en el pastizal. Crédito: Ibolya Sáfiánné

Ibolya –

Si mi hija no quisiera convertirse en pastora, no la obligaría, porque si no quieres hacerlo, no lo vas a poder hacer bien. Tienes que amarlo. Solo puedes hacerlo si realmente quieres.

La clave, lo que nos hace únicos es que lo hacemos juntos como familia, en realidad dos familias (con la familia del hermano de mi esposo). Mi esposo siempre dice que, si trabajamos juntos, también salimos juntos y nos divertimos juntos.

La familia, y el amor a las ovejas, el amor a los animales. Esa es la clave sobre nosotros.

La familia trabajando junta en la granja. Crédito: Ibolya Sáfiánné

¿Puedes aprender a convertirte en un pastor tradicional?

Ibolya –

Esa es una buena pregunta y es difícil de responder. Lo primero que hay que decir es que, si quieres ser el mejor, tienes que nacer en ello.

Pero incluso si no naces en una familia de pastores, puedes aprenderlo si estás realmente comprometido. Necesitarías un buen maestro, alguien que sea un verdadero pastor, que tenga la experiencia y pueda enseñarte todos los aspectos y detalles del pastoreo. Pero requiere un conocimiento realmente complejo.

El ganado no es como un objeto. Si dejas un objeto, será el mismo cuando regreses, pero los animales siempre cambiarán.

Puede que les dé una enfermedad inesperada, y si yo no estoy y no lo detecto a tiempo, entonces morirá. Tienes que estar familiarizado con las enfermedades, y necesitas estar cerca de ellas todo el día para observarlas bien.

Si naces en una familia de pastores, tienes buen ojo para ello. Te das cuenta inmediatamente. Mi esposo o yo sabremos de inmediato si hay un problema – se puede ver en sus ojos, aunque los signos generalmente pueden ser muy leves. Pero amar tu trabajo es lo primero. Lo más importante es que ames a tu animal, porque entonces le prestarás atención.

Zsolt – 

Otros pastores argumentan que no puedes ser un pastor tradicional a menos que nazcas en una familia de pastores tradicionales. Si no estás con los animales desde la edad de uno, dos o tres años, es mucho más difícil obtener el tipo de apego necesario para amar a los animales de manera que puedas producir carne en un ambiente rico en amor.

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Flores de temporada que László le trae a Ibolya del pastizal. Crédito: Ibolya Sáfiánné
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László con sus ovejas en el pastizal. Crédito: Sándor Karácsony

¿Cuánto saben los húngaros sobre los pastores tradicionales?

Zsolt –

Muchos húngaros los conocen. En cuentos populares, historias bíblicas y festivales, los pastores están muy presentes.

En todas las demás familias húngaras, las madres y los padres leen cuentos populares cientos de veces a sus hijos, cuentos populares que están llenos de pastores. Generalmente hay una princesa, o una mujer de una familia rica que se enamora de un pastor de vacas, ovejas o cerdos, y el padre prohíbe la unión, diciendo que el joven es solo un pastor y que no es digno de su hija.

Luego, el padre crea competencias entre el pastor y otros príncipes y jóvenes ricos para demostrar que el pastor no es lo suficientemente bueno. Pero los pastores siempre ganan, porque son honestos, inteligentes y decididos.

Festivales folklóricos

Zsolt –

Los húngaros también ven pastores en festivales porque hay un movimiento para revivir las tradiciones folklóricas húngaras. Así que verán a los pastores en el escenario de estos festivales con sus hermosas ropas bordadas, y a todos les encanta fotografiarse y tomarse selfies con ellos.

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Ibolya y László en un festival. Crédito: Boldízsar Jenei
Traje tradicional usado en los festivales. Crédito: Ibolya Sáfiánné, György Czéher y Tiborné Both

Ibolya –

En estos eventos siempre llevamos nuestra ropa festiva y, si es posible, asistirá toda la familia. Es un momento para que conozcamos a otros pastores y nos divirtamos, cantando canciones y compartiendo historias hasta altas horas de la noche. Es una oportunidad para que recarguemos nuestras baterías.

Zsolt – 

Sin embargo, muchos húngaros solo ven pastores en estos festivales. Hace alrededor de 50 a 80 años, casi todos tenían una conexión personal directa con un pastor, pero ahora es solo alrededor del 5-10% de la población, o incluso menos.

Entendiendo lo que hacen los pastores

Zsolt –

Aunque los pastores están presentes en los festivales y en las historias de Hungría, esto no significa que las personas comprendan completamente el trabajo que realizan; que producen carne sana y sabrosa y que manejen pastizales.

László – 

La gente no siempre ve que los pastores también trabajamos por la naturaleza: manejamos los pastizales, manejamos las malezas, los arbustos y los juncos. La gente piensa que toda esta diversidad viene únicamente de la naturaleza; piensan que estos pastizales sobrevivirán si pastoreo.

El pastoreo adecuado necesita pastores bien informados. De lo contrario, el ganado solo comería la buena hierba. Muchas áreas todavía tienen su propio pastor que conoce el área y sabe qué se puede pastar, dónde y cuándo.

Sin pastores, estas áreas ya no serían pastizales, solo terrenos ásperos.

Si se les deja a su suerte, las ovejas y el ganado tienden a sobrepastorear algunas partes de los pastizales.

Pero si un pastizal no se pasta en absoluto, se llenará de maleza. Las pasturas se arruinarían y se volverían salvajes si no hubiera ganado en ellos. Los arbustos espinosos y los cardos se extenderían, y los conservacionistas tendrían que cortarlos con máquinas costosas a precios elevados de combustible.

Las grabaciones de Ibolya de canciones folclóricas tradicionales húngaras tomadas en festivales.

Erdő, erdő, de magos…

Pozse Mári libája…

Fotografías de drones de Sándor Karácsony, tomadas del vídeo Una Tarde en el Pastizal con el Pastor Lászlo Sáfián

László –

Los pastores también pueden ayudar a restaurar estos pastizales abandonados. Con el pastoreo, los pastizales se vuelven mucho más limpios; se refrescan. Más pájaros van allí. La vida silvestre tiene un ciclo, que requiere ganado.

Mucha gente no considera que el conocimiento de los pastores sea un conocimiento real.

No aprendimos de los libros—heredamos este conocimiento, nacimos en él. Si la gente nos respetara un poco más, eso significaría mucho.

La gente también necesita entender que “si se van los pastores, también se irá la carne sabrosa.

Ibolya – 

Creo que el gobierno debería educar a los jóvenes sobre lo que realmente significa el pastoreo, para hacerles entender que es difícil. Algunas personas dicen que los pastores solo tienen que estar parados y no hacer nada en todo el día.

Para ayudar con esto, [Zsolt y László] crearon una película que sigue a László durante una tarde de pastoreo, donde describe las complejidades del trabajo y el conocimiento tradicional necesario para llevarlo a cabo. Ha sido extremadamente popular en Hungría y el equipo también produjo una versión en inglés para poder ampliar el alcance de la película.

Una Tarde en el Pastizal con el Pastor László Sáfián. Crédito: Zsolt Mólnar y Sándor Karácsony

Zsolt –

La película obtuvo cientos de miles de visitas y las personas que comentaron frecuentemente dijeron que nunca se dieron cuenta de cuánto conocimiento y paciencia se necesita para ser un pastor tradicional.

Ibolya – 

Más recientemente, la opinión de la gente sobre los pastores se ha vuelto más positiva, especialmente desde que la película estuvo disponible. Más personas están valorando este conocimiento y apreciándolo. Ya sabes, cada profesión, cada trabajo tiene un conocimiento especial, no importa lo que sea. Antes de juzgar algo, deberías mirarlo mejor.

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Divisiones de género en la comunidad de pastores húngaros

Divisiones de género en la comunidad de pastores húngaros

Zsolt –

El pastoreo tradicional siempre ha estado muy marcado por el género. En el pasado, era un trabajo físicamente difícil, por lo que los hombres cuidaban las ovejas y las vacas, y las mujeres cuidaban los animales más pequeños que puedes cuidar en casa; las gallinas y los cerdos. Más recientemente, lo que suele caer sobre las mujeres es el aumento del trabajo burocrático que ahora es obligatorio.

En estos días, las divisiones de género tradicionales se están volviendo menos marcadas, ya que hay máquinas para hacer parte del trabajo pesado.

Ibolya – 

Los roles típicos de las mujeres son atender a los corderos jóvenes, darles comida y bebida y vigilarlos. Comprobamos que estén sanos y mantenemos los rebaños ordenados. El rol típico de los hombres es llevar a los animales a pastar, y él mantiene el horario de quién va a dónde.

Es cierto que también hago mucho papeleo–en los últimos diez años ha habido mucha burocracia y papeleo. Tenemos que hacer muchas cosas en papel y nos lleva más tiempo del que dedicamos a los animales. Es muy frustrante, porque si hay un error en el papeleo, no recibiremos la subvención, o incluso podrían cerrar nuestra granja.

En los viejos tiempos, yo sólo salía con los animales. Mi marido iba en una dirección con los animales más grandes y yo iba en otra dirección con los corderos jóvenes y las ovejas más viejas. Me encanta esto del pastoreo, estar en la naturaleza y disfrutar de la libertad de este estilo de vida.

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Ibolya Sáfiánné pastoreando en invierno. Crédito: Ibolya Sáfián
Ibolya Sáfiánné y su hija Ibolya Sáfián, Erika Sáfiánné y su hija Erika Sáfián pastorean las ovejas. Crédito Ibolya Sáfián e Ibolya Sáfiánné

Ibolya –

Mi hija y mi sobrina también hacen los trabajos de los hombres y de las mujeres. Erika lleva ella sola las ovejas a pastar, conduce el tractor y hace el trabajo de las máquinas. Le gusta hacer el ‘trabajo de los hombres’. Pero en realidad, en nuestra granja no solemos diferenciar las cosas como trabajo de hombres o de mujeres.

Lo hacemos todo juntos, hombres y mujeres. Cada uno tiene sus propias responsabilidades, por supuesto, pero si es necesario, todos pueden hacer de todo.

Pastores trabajando junto con los guardas de conservación

Zsolt –

Históricamente, los guardas de la conservación y los pastores tradicionales han tenido formas distintas de trabajar, pero en las últimas décadas han empezado a colaborar más en el manejo de la tierra, especialmente de los pastizales ricos en especies de las áreas naturales protegidas.

Esta colaboración ha empezado recientemente, porque históricamente la conservación de la naturaleza siempre se ha basado en una visión del mundo que viene de la ciudad, de la ciencia, en la que toda la mentalidad de la conservación de la naturaleza es que los humanos viven en la ciudad y la naturaleza está fuera de la ciudad. Y la gente que vive en la naturaleza la destruye, así que tenemos que controlarla.

Esto es en parte cierto, pero es peligroso llevar a cabo una conservación así sin entender lo que algunas personas – los pastores, por ejemplo – hacen en la naturaleza, con la naturaleza y para la naturaleza, y lo que intentan conseguir. Y por eso había una división entre los guardas de la conservación y los pastores, porque simplemente no podían entender los objetivos del otro.

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Miembros de la Plataforma Intergubernamental Científico-Política sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas (IPBES por sus siglas en inglés, Intergovernmental Science-Policy Platform on Biodiversity and Ecosystem Services) y de la familia Sáfián

Zsolt –

Fue muy difícil para ellos encontrar canales de comunicación y crear una confianza mutua. Pero es importante hacerlo, porque los guardaparques son los intermediarios del conocimiento entre los conservacionistas de base científica y los usuarios tradicionales de la tierra, como los pastores.

László – 

Las cosas están mejorando en nuestro país.

Hace 20 años, los guardas de conservación no hablaban con nosotros. Nos criticaban sin preguntarnos nada. Nos criticaban sin preguntarnos nada. Ahora paran y podemos hablar sobre el pastoreo y el manejo de los pastizales.

Por ejemplo, hemos recuperado una antigua práctica de manejo de praderas: las pastamos a principios de la primavera, para poder cortar el heno más tarde, cuando la normativa de la Unión Europea nos lo permite. Y esto también es bueno para las aves que se reproducen en el suelo.

Zsolt – 

Los pastores y los guardas tienen muchos objetivos comunes, como evitar el sobrepastoreo y el subpastoreo, y detener la propagación de malezas y especies invasoras. Aunque alrededor del 50-60% de los objetivos son los mismos entre guardas y pastores, la cuestión es cómo se alcanzan esos objetivos. Ahí es donde pueden surgir los conflictos.

Tienen visiones diferentes del mundo y conocimientos distintos sobre los pastizales. Por ejemplo, aunque compartan el objetivo de pastorear adecuadamente la tierra, un pastoreo “adecuado” significa algo diferente para un pastor y para un guardaparque. Pero en cuanto se escuchen y se entiendan, podrán llegar rápidamente a un mejor arreglo. Y un pastor está mucho más dispuesto a llegar a un acuerdo si se siente comprendido.

László –

Tenemos que reconocer los conocimientos del otro. Debemos enseñarnos unos a otros. Muchos conservacionistas dicen que nuestro pastoreo tradicional es muy necesario en las zonas protegidas porque hace muchos milenios había caballos silvestres, ganado silvestre y bisontes, y estos hábitats necesitan el pastoreo para mantener su diversidad. Otros sólo ven las zonas sobrepastoreadas manejadas por “pastores” menos conocedores.

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Fotografías de drones de Sándor Karácsony, tomadas del vídeo Una Tarde en el Pastizal con el Pastor Lászlo Sáfián Crédito : Sándor Karácsony

El futuro del pastoreo tradicional

Zsolt –

El pastoreo tradicional es una forma de criar animales que requiere mucha mano de obra y se basa en los conocimientos tradicionales acumulados durante generaciones. Sin embargo, esto no se refleja en el precio de la carne cuando se vende. Como no se vende a un precio elevado, no puede competir con otros productores de carne menos éticos. Los pastores necesitan apoyo porque tienen que competir con la producción de carne poco ética, tanto dentro como fuera de Europa.

En Hungría hay medio millón de hectáreas de praderas naturales y seminaturales ricas en especies en áreas protegidas que pueden producir alimentos para el humano sólo si se utilizan con un pastoreo adecuado. Si la gente entendiera esta conexión, los pastores tendrían más respeto y una vida mejor. Si se respetara a los pastores y se les pagara justamente, muchos jóvenes estarían encantados de volver a las tradiciones, por supuesto con las innovaciones necesarias.

Ibolya – 

Me preocupa el futuro del pastoreo. La gente que trabaja con animales necesita que se le pague lo suficiente para llegar a fin de mes.

Mucha gente ha dejado el pastoreo porque no les pagan lo suficiente, es un trabajo muy difícil y se paga muy poco.

Y aunque amen su trabajo, tienen que dejarlo porque no pueden mantener a su familia con el dinero que ganan.

Para ayudarnos, creo que el gobierno debería educar a los jóvenes sobre lo que significa realmente el pastoreo. Para que entiendan que es difícil, pero que si lo amas, puedes hacerlo bien y producir carne de alta calidad. Por ejemplo, el gobierno podría crear una escuela de formación para pastores, para ayudar a que la tradición perdure.